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El césped natural tiene multitud de ventajas ya que ayuda a controlar la erosión del terreno y lo estabiliza, además aporta frescor y regular la temperatura del aire en momentos donde las temperaturas son elevadas.
Este césped cuenta con todas las ventajas que una planta aporta al terreno y gracias a su red de raíces forma una alfombra con poros que absorbe el agua de lluvia en lugar de generar escorrentía y arrastrar las partículas del suelo. Un césped tupido absorbe seis veces más lluvia que el resto de métodos.
El césped intercepta el agua de lluvia y la reparte por la vegetación de la zona, lo que ayuda a que se necesite menos agua de riego. Además, es capaz de absorber los rayos del sol, lo que ayuda a mantener más fresco el ambiente consiguiendo un efecto de aire acondicionado natural.
El césped natural es capaz de reducir el ruido y limpia el aire de polución.
A todas estas ventajas se añade que el césped natural cuenta con un precio inicial mucho menor que su principal sustitutivo el césped artificial, que no deja de ser un producto de plástico.
Colocar un jardín de césped natural puede ser fácil pero quizás prefieras contar con la ayuda de un jardinero profesional para su instalación, así podrás asegurarte que todos tus tepes van a colocarse perfectamente. Es muy importante la preparación del terreno antes de ponerlo en el jardín para conseguir un césped fuerte y duradero.
Una variedad de césped natural adecuada marca la diferencia en el jardín ya que dependiendo la climatología de la zona y el uso del césped seguramente sea mejor una variedad u otra.
La variedad perfecta para jardines y la más apta en toda la Península Ibérica es Miranda Grass (80% Festuca Arundinácea, 20% Poa Pratensis), este césped se mantendrá verde todo el año, es resistente al pisoteo y tiene buena resistencia a las enfermedades acompañada de un mantenimiento poco exigente.
Hay otras opciones como las Bermudas Híbridas (Tifway 419 o Tahoma 31) que pueden ser una buena opción para jardines con climas cálidos, además estas variedades requieren menos agua y menos mantenimientos.
En conclusión, contar con césped natural adecuado es un valor seguro y duradero para una zona verde, ¿necesitas saber más? ¡Contáctanos!